No sé si lo sabías, pero por esa sonrisa de tu cara, creo que sí. Hoy es el día mundial de las sonrisas, la jornada en la que se reivindica que vivimos en el mundo al revés. En una realidad en la que, en lugar de encontrar razones por las que dejar de estar feliz, tratamos de hallar constantemente alguna que nos permita estarlo. Por ello vamos a darte cinco motivos que nos hacen reír en el hogar y sentirnos un poquito más especiales. ¿Te apetece?
Razones para encontrar tus sonrisas en el hogar
Como veras en las siguientes líneas, no se trata de razones muy extravagantes. Son meras curiosidades, anécdotas y motivos sin peso que nos hacen reír. Al final, las sonrisas más importantes son las que se ocultan en los pequeños detalles del día a día.
Encender la radio y que suene en ese momento tu canción favorita
En el mundo 2.0 en el que vivimos podemos escuchar nuestra canción favorita en cualquier momento, pero, ¿y la ilusión que sentimos cuando al azar la encontramos? Es una de esas sensaciones que no se pueden medir y que nos hacen reír como solo el arte es capaz de lograr.
El día mundial de las sonrisas debería ser derecho que esto sucediera.
Encontrar dos cervezas fresquitas cuando pensabas que no quedaban
Que hay que cuidarse, que la salud es lo primero, pero a todos nos apetece una cerveza bien fresquita después de un día duro de trabajo. Esa sensación de llegar a casa, estar seguro de que no queda ninguna en el refrigerador y hallar dos es indescriptible.
Todos tenemos que tener un vicio culpable. Sobre todo en un día como hoy.
Saltar a la cama tras un día duro en el trabajo
Da igual la edad que tengamos. Todos nos sentimos protegidos en la cama, bajo las sábanas o encima de ellas. Es un lugar donde los monstruos no pueden atraparnos y que nos provoca un caudal de sonrisas.
Sonreír tras sentir que toda la presión del día se ha superado y que tenemos el derecho a pasar un buen rato es indescriptible.
Encontrar un billete en el bolsillo
A todos nos ha pasado alguna vez y la cara que se nos ha quedado es el reflejo de las sonrisas más sinceras. ¿Te acuerdas de esa sensación de meter la mano en el bolsillo y sacar un billete del mismo? Esa tarde ya tenemos capricho asegurado.
Adivinar cuándo saldrá el pan del tostador
Las cuentas atrás nos gustan. No sabemos por qué, pero sacan a relucir todo nuestro ingenio y necesidad de competición. Tratar de adivinar cuándo saldrá el pan del tostador es algo que nos encanta.
Esa sensación de decir ahora y que todo vaya bien es indescriptible, ¿verdad?
Es muy fácil encontrar las sonrisas entre la maraña de la rutina del día a día. Solo tenemos que saber buscarlas. Los pequeños detalles son los que marcan la diferencia.