Existe una incertidumbre ineludible al rentar nuestra propiedad, una duda que nos carcome y que nos mantiene despiertos durante la noche. ¿Podré rentar mi casa rápido o tardaré mucho? ¿Hay indicios que me ayuden a adivinar esta incógnita? Pues la verdad es que no sabemos si llamarlos “indicios”, pero lo que está claro es que hay factores que influyen a la hora de acaparar clientes, aquellos aspectos relacionados con el estado de la casa. Cuando una persona está buscando propiedades en nuestro portal, no solo se fijará en los metros cuadrados y en el precio. También prestará especial atención a la estética del inmueble; a las condiciones de sus instalaciones; a si necesita reformas para que luzca como nueva y así poder rentarla. Si un posible cliente percibe que el domicilio en cuestión presenta muchos desperfectos, preferirá seguir buscando otras opciones. Y eso es lo último que deseamos.
Puede que nos preocupe la cantidad de dinero que pudiéramos gastar en reparar todos los defectos de nuestra propiedad. Sin embargo, existen algunos trucos básicos para realizar reformas antes de rentarla. ¡Y sin gastar demasiado! ¡Échale un vistazo a estos cambios que deberías considerar para tu vivienda!
Lo primero que se debe tener en cuenta es que las reformas están pensadas para que el inquilino que rente el inmueble pueda gozar de una estancia confortable. Entonces y solo entonces, deberás valorar lo siguiente:
- Conocer el perfil del cliente a quien deseas rentar
- Orientar el diseño a las necesidades de tu inquilino
- Invertir en reformas que se ajusten al presupuesto
- No dejar inconclusos los cambios de la vivienda
Una vez analizados todos los puntos anteriores, podrás llevar a cabo las reformas que necesite la casa. Porque las posibilidades de detectar desperfectos aumentan cuando la vivienda ha envejecido mucho. Y es ahí cuando debes priorizar ciertos arreglos, porque existen algunos que urgen más que otros a la hora de rentarla. Éstas son las principales reparaciones que debes efectuar sin tener que rascarte demasiado el bolsillo.
Identificar los desperfectos
Antes de empezar con las reparaciones debes revisar la casa completamente, elaborando una lista de aquellas partes que requieran de determinados apaños. De esta manera, será más fácil organizar las reformas para establecer el orden de prioridades del que hablábamos.
Reformas en el baño
El baño es un espacio que debe estar siempre en perfectas condiciones. Y lo más seguro es que tras algunos años dicha estancia necesite ser remodelada. Deberías cambiar los canceles si se ven desgastados, la taza del inodoro si no se ajusta correctamente y el lavamanos si ha sido castigado por el paso del tiempo. Contempla la opción de instalar un plato de ducha si la bañera es demasiado vieja. ¿Has probado en sustituir esos muebles desvencijados por estanterías modernas? Ganarás en todos los sentidos.
Iluminar la casa
La casa siempre debe estar dotada de la mejor iluminación. Una vivienda con buena luz aparenta amplitud de espacio. Tendrías que comprobar si la iluminación funciona correctamente apretando interruptores y revisando la caja de plomos. Chequea que las bombillas se conserven en un estado óptimo y valora la posibilidad de redistribuir la iluminación. Recuerda lo siguiente: la luz es primordial.
Repara las Tuberías
Al inquilino siempre le preocuparán los detalles, incluso aquellos que pasan desapercibidos al no poderse apreciar a simple vista. Como las cañerías. Deberías prestar especial atención en las tuberías, verificando que no estén atascadas. En caso de encontrarse obstruidas, tal vez tendrás que levantar el suelo para cambiarlas. Aunque bien es cierto que existen productos que pueden repararlas sin dejar la propiedad patas arriba.
Nuevo diseño de la cocina
La importancia de la cocina es innegable, por eso cualquier inquilino apreciará que una estancia tan relevante en el hogar no presente daños. Es probable que tengas que instalar un tapiz para revestir los muebles. Cambiar grifos oxidados y pintar azulejos deteriorados son tareas que están a la orden del día cuando queremos reformar el lugar donde cocinamos nuestras recetas.
Resanar paredes
¡Cuidado con los hoyos en las paredes! ¿Qué pretendemos? ¿Que nos vean desde la calle? Hoy en día, con tantas tiendas de materiales y tlapalerías, serás capaz de encontrar multitud de productos para resanar esos agujeros que hacen que nuestra casa parezca un queso emmental.
Puertas y ventanas
Cuando un cliente visita un inmueble que suscita su interés, sus ojos apuntan directamente hacia los marcos de las ventanas y las puertas. Parecen sentirse hipnotizados por ellos. Si pretendes mejorar su deterioro, deberás lijar las puertas para luego barnizarlas. Del mismo modo, tendrás que comprobar el estado de las chapas. Las ventanas se verán sometidas a una buena limpieza para cubrirlas con un poco de laca. Eso sí: solo en el caso de que sean de aluminio.
Estado de los muebles
Si deseas rentar una propiedad amueblada, es importante comprobar el estado de los muebles. Un truco sencillo y que le da cierto estilo a la sala es tapizarla con retazos de tela. Deberás lijar y barnizar los muebles de madera para que luzcan como nuevos.
Cables y enchufes
El cableado y las instalaciones eléctricas envejecen rápido con el paso del tiempo. Lo ideal consiste en sustituir todo el sistema para evitar fallas. No te olvides de revisar que todas las tomas de corriente funcionen sin problemas.
Consultar con profesionales y comparar presupuestos
Para que puedas contemplar distintas opciones, deberás consultar distintos precios con diferentes profesionales hasta que puedas decidirte por un presupuesto. Si puedes obtener un esbozo estimado del mismo, al final deberás seleccionar la alternativa que más se ajuste a tus necesidades.
Estas simples reformas en tu casa no son nada costosas y te ayudarán a atraer más prospectos para alquilar. Y si te puede la curiosidad y pretendes obtener más consejos para poder vender o rentar una propiedad, siempre puedes visitar nuestro blog.