Todo está preparado. Ya la tenemos aquí. Las nueve posadas están listas, preparaos para el peregrinaje. Afinad vuestras voces para los villancicos y la puntería para las piñatas. Pero quitaos la venda de los ojos para comprobar que la Navidad ha llegado, como todos los años. Si todavía no habéis decorado vuestro hogar tal y como señala la tradición, ya os podéis dar prisa, porque se nos echa el tiempo encima. Y ya que hablamos de tiempo, os queremos regalar una cifra: 8 siglos. Ése es el tiempo que ha pasado desde que empezó a instaurarse la costumbre de preparar el nacimiento, que se dice pronto. En este artículo nos gustaría ofreceros algunas ideas que os sirvan de ejemplo para colocar al niño, la mula y el buey. No todos los pesebres que os enseñaremos podrán caber en vuestra casa (a no ser que os llaméis Kane y viváis en Xanadú), pero tal vez os ayuden para que os entren ganas. Aunque si habéis hecho un hueco en vuestro estómago para el bacalao, los romeritos y el ponche, también podéis guardar un espacio en casa para algún nacimiento navideño mexicano.
Dicen que Francisco de Asís fue quien impulsó la moda. Por aquí creemos que alucinaría si viese hasta dónde ha llegado la representación que hizo en su día.
1. Dicen que fue una luz en el cielo la que guió a los Reyes Magos hasta Belén, pero si el pueblo hubiese estado así de iluminado no hubiera hecho falta estrella alguna.
2. El arte huichol es uno de los orgullos nacionales, por eso no podía faltar un nacimiento elaborado con una técnica tan laboriosa.
3. Agustín Cruz Tinoco utilizó la madera policromada para crear este nacimiento en bicitaxi. Igual retrata el momento en que la familia escapa hacia Egipto para huir de Herodes…
4. Si lo ves desde lejos dirías que es un ramo de flores silvestres que adornan tu comedor, pero no. Acércate y te darás cuenta de que es un nacimiento al que no le falta nada. Ni siquiera la paloma.
5. Pasemos a otras dimensiones: he aquí el nacimiento más grande del mundo. Por supuesto que en vuestra casa no cabe. Dos récords Guinness ni más ni menos.
6. El agujero que tienen estas curiosas figuras de barro no alberga ninguna función estética. ¿Adivinas qué son? Eso es: son silbatos. A Santiago Montoya Vázquez le interesaba darle otro uso a las figuras.
7. Porque la chuspata no solamente sirve para hacer sombreros o cestos. También puede aprovecharse para crear nacimientos. O al menos eso pensó la artesana Expedita Ascencio de Puácuaro.
8. Los nacimientos cambian en función de cada región. En México, es típico que las figuras masculinas estén tocadas con un sombrero y que las mujeres vayan con vestido. Lo que ya no es tan típico es lo la barca.
Puede que sean arriesgados, y puede que tú seas más clásico. Pero también puedes lanzarte a la piscina y hacer que esta Navidad sea diferente.
pueden darme el precio del naciemieno grande por favor
Hola Carmen! Estuvo en el Estadio Azteca, en DF