Todos hacemos balance mientras intentamos no atragantarnos entre uva y uva. Echamos la vista hacia atrás y nos acordamos de aquellos números que quisimos conseguir en 2015, pero que se quedaron a medio camino. Entonces hacemos acopio de fuerzas y nos decimos a nosotros mismos que 2016 será nuestro año, al menos en cuanto a lo profesional se refiere. Los vaivenes de un asesor son impredecibles, dependen en gran parte de los propios altibajos del mercado de bienes raíces. Pero llevar a la práctica una determinada metodología puede allanarte el camino hacia el éxito. Éste puede ser tu año si te lo tomas en serio. Para llegar a las ventas de cualquier lobo de Wall Street que se precie, empieza por cumplir estos pequeños propósitos que para un agente inmobiliario serán indispensables. Si lo haces nada más estrenar tu nuevo calendario, empezarás el 2016 buen pie.
Ya sabéis que nos gusta regalar consejos, y como seguimos en Navidad…
Localiza inmuebles
Debes intentar localizar nuevas propiedades que sean susceptibles de venderse o rentarse. Siempre es recomendable renovar el stock para atraer a clientes desconocidos. ¿Que cómo vas a encontrarlo? Recorriendo zonas si es preciso, peinando barrios como si buscaras al sospechoso de un crimen. Dedica unos cuantos días a la semana para saber quién es el propietario que está detrás de cada casa. Realiza tus pesquisas.2
Organiza tu base de datos
Si tienes una agenda más desorganizada que un regimiento batiéndose en retirada, pon algo de orden en ese desbarajuste. Seguro que encuentras a clientes potenciales en medio de todos los datos que has ido recabando con el paso del tiempo. Nunca sabrás dónde podrás hallarlos. Puede que se escondan entre antiguos clientes con los que habrás trabajado antes, o incluso entre aquellos amigos de la infancia que hace tanto que no ves.
Reparte tarjetas
Si no, ¿para qué las utilizas? ¿Para abultar tu cartera? La tarjeta de presentación de un agente inmobiliario puede llegar a ser una herramienta determinante, un instrumento de suma utilidad para que alguien se acuerde de ti cuando necesite tus habilidades. Regálala en las reuniones o encuentros que tengas con clientes o compañeros de tu gremio. Seguro que en la cartera de otra persona tu tarjeta pueda reportarte más beneficios que si la mantienes apartada del mundo, en la sombra. Sácala a la luz a partir del próximo año.
Pégate al teléfono
Otro camino para captar posibles clientes es recurriendo a las llamadas telefónicas. Destinar una parte importante de tu tiempo en permanecer con la oreja pegada al auricular de tu celular puede resultar muy efectivo. Escucha, empatiza, encuentra necesidades. Con un talante comprensivo, seguro que atraes la atención de tu interlocutor. Y si después de eso eres capaz de llevar un control de lo conseguido tras cada conversación en forma de estadísticas, todo se presentará ante ti de manera más clara.
Metas económicas
Márcate un objetivo, pero tampoco tienes que autoflagelarte si no logras alcanzarlo. No te frustres, debes tener los pies en el suelo para no dejarte llevar por una inflación de autoestima desproporcionada. Tu meta, al menos, tiene que ser acercarte cuanto más mejor a esa cifra al cerrar el ejercicio anual. Puede ser el motor que te impulse a trabajar con más ímpetu. Si realizas un presupuesto en el que estipules cuáles son tus posibles ganancias teniendo en cuenta tus gastos, podrás poner en tu horizonte profesional ese número para perseguirlo hasta el día del juicio final.
Sigue formándote
Nunca vas a saber suficiente, siempre hay algo más para aprender. Por mucho que lleves un tiempo significativo dentro de la industria, habrá conocimientos que deberás seguir adquiriendo para renovar tu sabiduría como agente inmobiliario. Existe una gran variedad de cursos especializados para el agente inmobiliario que encajan con tu perfil. Matricúlate en alguno para perfeccionar tu técnica. Podrás lucir otro título en tu currículum y podrás contar con otro diploma en tu haber. Nunca abandones tu formación mientras puedas seguir estudiando.
Anúnciate
No hemos echado cuentas para saber cuántos agentes inmobiliarios existen en México, pero pondríamos la mano en el fuego al afirmar que debe haber tantos como fans en un concierto de Justin Bieber. Por eso mismo tienes que diferenciarte del resto. En pleno apogeo de la era de internet, recomendamos encarecidamente que tengas una página web profesional en la que anunciarte. Así podrán encontrarte con facilidad aquellos que quieran precisar de tus servicios.
Dicen que tienes que pedir un deseo por cada uva que devores. Pero doce deseos por doce uvas tal vez es demasiado. Por eso hemos creído conveniente dejar los propósitos en siete, así podrás coger algo de aire mientras piensas y masticas.