Puede que sea una de esas decisiones que te marcan de por vida. Una dicotomía cuyos extremos te atraen a partes iguales: irte de alquiler o adquirir una vivienda. Tan solo te falta agarrar esa calavera de Hamlet para mirarla y pronunciar la famosa frase de la obra. Pero esto no es teatro, es la vida real. Y ése es el motivo por el cual cuesta tanto decantarse hacia un lado u otro. Pero bueno, dejemos de exagerar. Al final será verdad que creemos que estamos en un drama shakesperiano. En iCasas no nos gustan las tragedias, somos más de echar un cable a quien lo necesite en todo lo relacionado con lo que conocemos. Por eso mismo, si en estos momentos te encuentras en una encrucijada y un camino señala hacia la renta y otro sendero apunta hacia la compra, nos gustaría ayudarte y convertirnos en tu brújula inmobiliaria. Todos los senderos tienen sus pros y contras.
He aquí las ventajas y desventajas de rentar o comprar una casa. Una vez las conozcas, no será tan complicado decidirse.
Lo bueno de Rentar
- Es una forma de independizarte del núcleo familiar. Puede ser una gran idea para los jóvenes que quieran cambiar de ubicación constantemente según sus requisitos laborales.
- La mensualidad de la renta es accesible para muchos. Eso sí: siempre y cuando no seas de los que tienden a ahorrar demasiado. Podrás encontrar alquileres para todos los bolsillos y necesidades.
- Podrás descubrir alquileres en toda la ciudad sin limitarte a las afueras de la misma, donde se encuentran los “precios de venta” más económicos.
- No hay compromiso a largo plazo, ya que entre tú y el arrendador acuerdan cuánto tiempo vivirás en la propiedad.
- No conlleva tanto papeleo como adquirir una vivienda.
- No resulta tan aparatoso cambiar de piso en caso de equivocarse.
- No hace falta desembolsar tanto dinero en el pago inicial.
Beneficios de comprar
- Adquieres un patrimonio para toda la vida que puede ser una buena herencia para tu familia, además de tener un valor económico para emergencias.
- La casa es tuya desde el momento en el que la compras, tienes control absoluto sobre la vivienda y no tienes que pedir permisos para nada.
- Al ser el dueño absoluto de la vivienda puedes hacer negocio con ella alquilándola a personas que no deseen comprar. De esta manera, obtendrás un ingreso extra a tu sueldo.
- Inviertes a la larga en una vivienda propia y no le das tu dinero a alguien más por una casa prestada.
- Puedes realizar las modificaciones que quieras, no dependes de los permisos de tu casero para poder pintar paredes o tirar muros.
- Podrás tener una vivienda tuya una vez te jubiles, que es uno de los miedos de mucha gente cuando se hace mayor.
- Una vez has finalizado el pago total de la hipoteca, ya no tienes que pagar más.
Y ojalá la vida fuese de color rosa. Pero del mismo modo que no estamos en una obra de teatro de Shakespeare, tampoco estamos en una canción de Edith Piaf. Por eso queremos mencionarte los puntos en contra de rentar o comprar una casa.
Los inconvenientes de un alquiler
- Cualquier cambio que desees realizar en la estructura de tu vivienda alquilada dependerá del permiso de quien te la renta. Recuerda: él es el propietario.
- Los precios de las rentas tienden a subir cada año dependiendo de la inflación monetaria. Por ello, si tenías un presupuesto destinado al alquiler, éste podría variar y tal vez no te alcance.
- Cuando termine tu contrato, si el dueño decide que ya no quiere rentar la propiedad, tendrás que desocuparla sin replicar.
- Si abandonas la vivienda antes de que finalice tu contrato te van a penalizar económicamente.
- Todo el dinero que gastes para mejorar o reparar la vivienda no es una inversión, no lo podrás recuperar. Además, si el dueño te pide que dejes el lugar como estaba, tendrás que gastar más en rehacer la vivienda. Muchos contratos de arrendamiento estipulan esta condición.
Las desventajas de las hipotecas
- No es un gasto del que puedas desprenderte fácilmente. Tener una hipoteca implica comprometerte económicamente con el banco durante mucho tiempo. Tendrás que considerar este gasto dentro de tu sueldo todos los meses. El tiempo dependerá de la cantidad a desembolsar.
- Debes haber ahorrado desde hace unos años atrás, pues el primer pago, una vez que te autoricen la hipoteca, es del 20 al 30 por ciento del costo total de la vivienda.
- Deberás pagar un impuesto por uso de suelo, que es el predial. Este pago no se puede ignorar por ningún motivo, sino podrían embargarte. Así que aparte de tu mensualidad de la hipoteca, una vez al año agregarás este impuesto a tu cuenta.
- Los bancos exigen el pago de algunos seguros obligatorios.
- En algunas comunidades independientes existen ciertos pagos de mantenimiento de los que no puedes escapar como propietario de una vivienda
- Al menos un 25 % del total de tu sueldo se irá con tu hipoteca. Además, si consideras comprar, debes tener en cuenta que no puedes ganar menos de 30 mil pesos al mes para poder pagarla a 20 años.
Estamos convencidos de que con las cartas encima de la mesa podrás tomar la decisión que mejor te convenga. Pero si sigues teniendo dudas, tal vez lo que mejor podrías hacer es visitar nuestro portal, donde hallarás multitud de opciones de compra y renta.
Fuente: http://www.icasas.mx/venta/casas-quintana-roo-cancun/venta-casa-quintana-roo_24475?param-urlBase=www.icasas.mx/venta/habitacionales-quintana-roo-2_0_23_0_0_0/p_10 – Remax Paradise