¿Alguna vez has pensado en hacer una lista de todas las cosas a tener en cuenta antes de comprar una casa? Piénsalo por un momento. Acabarás rellenando tantas hojas en blanco que al final se amontonarán como los apuntes de tu próxima novela. Pero si existe una frase que deberías anotar entre ese manojo de folios sería la siguiente: es poco probable que podamos pagar la vivienda al contado. Ése es el motivo por el que tanta gente acaba solicitando una hipoteca al banco. No hay otro. Aunque si optas por ese camino, deberás contemplar que para solicitar un crédito tienes que demostrar un óptimo historial crediticio, así te quitarás de encima posibles problemas con la dichosa solicitud. Es vital que desde la entidad bancaria puedan constatar que los pagos de créditos pasados (automóvil, tarjetas de crédito y tarjetas departamentales) se hayan realizado a tiempo y con las debidas formas. Otro aspecto del que no puedes olvidarte es el que tiene que ver con las tasas de interés, ya que éstas deben ajustarse a tu capacidad de pago. Se van apilando todavía más hojas en ese montón del que hablábamos, ¿cierto? Y eso que solo estamos haciendo referencia a la hipoteca.
Pero como desde iCasas deseamos que estrenes tu nueva casa de la mejor de las maneras, te ofrecemos unos cuantos consejos que debes considerar cuando solicites tu hipoteca.
¿Qué debo solicitar, un crédito INFONAVIT o uno bancario?
En México, cuando empiezas a trabajar en una empresa, puedes acogerte por ley al derecho de las prestaciones. En concreto al de los créditos de vivienda INFONAVIT. Éste crédito consiste en la consecución de puntos equivalentes a sumas económicas que podrás utilizar cuando desees adquirir un inmueble. La antigüedad aquí es un plus, pues a más años acumulados en tu puesto de trabajo, mayor será la cantidad que de la que puedas disfrutar. Pero claro, todo tiene sus ventajas y sus desventajas. Ojalá todo fuese de color rosa.
Uno de los beneficios que ofrece el crédito INFONAVIT, en comparación con el crédito bancario, es que el primero cuenta con una tasa de interés mucho más baja (entre 4 y 10%), lo cual significa que es verdaderamente accesible para muchas personas. Sin embargo, al recurrir a este crédito éste puede facilitar préstamos no mayores a 1.400.000 mil pesos. Todo esto en función de la antigüedad y de los puntos reunidos, claro está. De ahí que si deseas adquirir una vivienda con un costo más elevado deberías entregar la diferencia restante con dinero de tu propio bolsillo. Por su parte, los bancos te prestan en base a tu capacidad de pago. Por lo que si el préstamo pudiese ser mayor, lograrías alcanzar la cantidad requerida para la casa de tus sueños.
¿Para cuántos años debo solicitar mi crédito?
Actualmente existe una gran variedad de créditos hipotecarios en el mercado. La tipología es tan rica y extensa como los platos que sirven en un buffet. Aunque tampoco deberías preocuparte por eso, pues no te costará demasiado elegir. Lo recomendable es que te inclines por los que te ofrecen lo siguiente:
- Esquemas en pesos
- Tasas fijas
- Pagos fijos
- Pagos a 15 años
¿Quieres librarte de angustias por culpa de posibles adeudos? Pues lo expuesto más arriba es tu solución. ¡Pero cuidado! Algunos de estos créditos no cuentan con tasas del todo bajas. Leer la letra pequeña es sumamente importante en todos los campos. Aunque también es cierto que existen aquellos que te ofrecen pagar durante 20 años. Eso es. Aquellos que te darán la posibilidad de abonar una mensualidad menor. Sólo debes grabarte a fuego la siguiente premisa: cuanto más breve sea el tiempo de pago, más alta será la mensualidad que deberás depositar.
¿Cuánto debo pagar al principio de mi crédito?
En este artículo la cosa va de premisas. Pues allá va otra: cuanto menos deuda, más rápido terminarás de pagar. Lo ideal es depositar un buen porcentaje del pago al principio. Por norma general, los bancos solicitan el 20% del valor del inmueble. Por eso estamos rezando para que seas una persona responsable y ahorradora, pues lo mejor en estos casos reside en aportar una cantidad un tanto superior. De esta manera resultará más fácil que te presten el crédito. Tu mensualidad se verá reducida asegurándote de que tu patrimonio no sea una preocupación. No queremos más jaquecas.
Que no te coman las comisiones
Otro factor a tener en mente es la comisión que cobran los bancos por apertura y cancelación de créditos. Por eso mismo, elegir la mejor opción acabará siendo crucial dependiendo de las comisiones ofertadas. Ajustémonos a nuestro presupuesto.
Tasa fija o tasa variable
Decidirte por un tipo de tasa al contratar un banco no es baladí. En absoluto. Uno tiene que conocer la amplia diferenciación de productos que existen en el mercado. La tasa fija ofrece la seguridad de que tu mensualidad sea la misma durante toda la hipoteca. La tasa variable dependerá del cambio monetario del peso, lo cual implica que la divisa pueda aumentar y bajar. Estar al tanto de estos vaivenes contribuirá a que prestes atención a los altibajos de la industria.
Pagar a tiempo para tener buen historial
Y por último, decir que deberías aprenderte una canción excesivamente conocida cuanto te otorgan la hipoteca, aquella que dice algo así como que los bancos desean buenos clientes que paguen a tiempo. ¿Te la sabes? Si cuentas con un buen historial crediticio, tal y como hemos mencionado con anterioridad, tendrás más posibilidades de cara al futuro. Es decir: será más fácil que tu banco u otros te ofrezcan ofertas suculentas.
¿Te has decidido ya? ¿Te hemos aclarado las cosas? Si la respuesta es afirmativa, nos vamos a dormir tranquilos.