¡Feliz día del beso! Sí. Esta fecha nos gusta mucho más que el día de los enamorados. Está menos manida, puede que su significado sea más bonito y, oye, que a todos nos gusta irnos a la cama con un beso, ¿o es que a ti no?. Nos permite sentirnos tranquilos. En casa. Sabiendo que, pase lo que pase, la persona con la que compartimos lecho u hogar no nos hará nada malo.
La importancia del día del beso en un hogar
En un hogar existen muchos tipos de besos y no nos mires así, que sabemos que eres consciente de ello. No es lo mismo un beso familiar, que entre dos hermanos o los que muestran una pasión desenfrenada. Sin embargo, a pesar de que nos podríamos tirar tantas horas como tiene un invierno hablando sobre este tema, hoy nos queremos centrar en los que llamamos de amor, cariño y templanza.
Son los besos que nos parecen más especiales. Vencen al paso de los años. Su existencia denota fortaleza. Una victoria contra la rutina y la pesadez del día a día. Señales en el cielo, inequívocas, de que todo irá bien. Salvan vidas y las cambian a un poquito mejor. Así que, ¿qué mejor idea que estos para hablar sobre los mismos?
Sin embargo, en iCasas México conocemos un secreto. Lo mejor de los besos no es recibirlo, sino ser capaces de hacer tan feliz a la persona que tenga delante que siente la necesidad de regalárnoslo. Porque te pueden haber contado mil mentiras, pero la realidad es que este tipo de gestos solo funciona así: generando y compartiendo felicidad, consiguiendo que quien te acompaña sea un poco más feliz cada día de su vida.
Por todo ello, nos hemos lanzado a la aventura. Podríamos haberte propuesto las realidades más diferentes, pero nos hemos quedado con la que nos parecía más divertida. Hoy esto va de sorpresas, porque lo único más especial que sentirse único es, además, no esperar que todo pueda ser más intenso. Así que te hemos planteado tres planes para conseguir sorprenderla en un día tan importante como hoy.
Da la vuelta al mundo con ella
Mira que acabamos de empezar con el post y tú ya te has sumido las manidas excusas. No vendríamos a salvarte el día del beso si pensáramos que solo se puede conseguir con tiempo o con dinero. De hecho, si la única manera en la que piensas que puedes lograrlo es con estos dos recursos… quizá no estás con la persona adecuada. Lo que nosotros te proponemos nace en el corazón.
Por todo ello, hoy te vamos a explicar cómo se puede dar la vuelta al mundo sin salir de casa y sin gastar dinero. Para ello necesitas un proyecto y un celular con cámara, que ya que vas a encontrarte con los secretos mejor guardados de este planeta, mejor que puedas retratarlos para fardar delante de tus amigos.
Proyector a la pared y sonrisa en la cara. Hazte mil fotos por todas las ciudades del mundo que quieras visitar y después vivid el mismo viaje todas las veces que os haga falta.
Un juego de pistas
Que sepas que cada uno de los consejos no es excluyente. Todo esto queda a tu libre albedrío. Puedes conformarte con uno, asumir tus posibilidades y solo si quieres mejorar tu puntuación, compaginarlas todas ellas.
Y puede que esta idea te parezca una tontería, pero en el mundo no hay nada mejor que abogar por ser tan felices como un niño cada vez que llega la ocasión. Por ello, y siempre a modo de sorpresa, preparar un juego de pistas, una especie de puzle, para que se vea sorprendida desde el momento en el que entra por la puerta, puede ser una gran idea.
Trabájate mucho este consejo. La sorpresa será enorme. Eso sí, las pistas no pueden ser al azar. Tienen que estar relacionadas con algo propio. Con una realidad que haya tenido importancia a lo largo de vuestra vida y que la puedes utilizar como gesto para decirle te quiero.
Un final con baile improvisado
¿Quieres ponerle el colofón final a esta realidad? Apuesta por el baile. Uno que parezca improvisado, pero en el que tú controles los tempos, las canciones y los ritmos para poder encandilarla con tu encanto y tu cariño.
Piénsalo de esta manera. Telón bajado y todo queda a oscuras. Se rompe el silencio con la chispa de una vela que se prende y entonces comienza a sonar vuestra canción. La invitas a bailar con una inclinación de otro tiempo y la miras con esos ojos que ven el futuro en su sonrisa.
La música habla por todos nosotros. Es el lenguaje de las emociones. Alberga secretos que nadie más conoce y es capaz de traducir gestos en significados ocultos. Por ello, háblale con la letra, con los gestos, con los pasos y sonreíd en lenguaje clave que nadie más sea capaz de comprender.
¿Tú en qué casa recuerdas haber tenido el beso más bonito del mundo? ¡Déjanoslo en los comentarios!